martes, 28 de marzo de 2017

Como puedo ayudar a mi hijo asmático?

Es una pregunta que muchos de ustedes como padres se hacen. Apenas el médico te dice que tu hijo tiene Asma pasan un sinnúmero de preguntas por tu mente
De forma sencilla te explicare que es Asma Bronquial, que puedes hacer y cuando debes preocuparte.


Asma Bronquial.
Muchas veces habrás escuchado el término Asma o broncoespasmo, de seguro también has escuchado un silbido cuando tu hijo respira o ves como respira con dificultad.

Primero debes saber que nuestro cuerpo necesita oxígeno para que todas las células pueden mantenerse vivas y que el sistema respiratorio es el encargado de esta extraordinaria labor. El sistema respiratorio está formado por vías respiratorias y pulmones. Las vías respiratorias es un sistema de tubos por donde pasa el aire que respiramos hasta los pulmones q a su vez es el lugar donde se realiza el intercambio de oxígeno y Co2.
En otras palabras necesitamos oxígeno para que cada célula se alimente y estas células al alimentarse desechan Co2, un gas que es tóxico y debe eliminarse. En los pulmones se realiza este intercambio entra oxígeno del ambiente a la sangre y la sangre entrega el Co2 a los pulmones para eliminarlo
Entonces como ves los pulmones se encargan de recibir el aire del medio ambiente cargado de oxígeno llevarlo hasta la sangre y recibir de la sangre el Co2 que es un producto de desecho y sacarlo al medio ambiente.


Decíamos que el aire entra y sale a través de un sistema de tubos o vías aéreas que comienza en las fosas nasales pasa por la faringe, laringe, tráquea, bronquios que inicialmente son el derecho y el izquierdo para cada pulmón, estos bronquios se van dividiendo de dos en dos en bronquios más pequeños y cuando son muy delgados se llaman bronquiolos que son los q finalmente entregan el aire a los alvéolos pulmonares donde se realiza el intercambio de gases.

Estos tubos muy delgados llamados bronquiolos tienen sus paredes varias capas una parte mucosa que produce moco y una parte muscular.


Cada elemento que forma el sistema respiratorio es muy importante. Esa capa mucosa recubre el interior de las vías aéreas en esa capa hay células que tienen filamentos que semejan vellos y otras células que producen moco entre ambos funcionan en equipo para protegernos de infecciones y otros elementos que pudieran entrar al interior de los pulmones y enfermarnos. El moco tiene elementos de defensa y los vellos tienen un movimiento permanente para sacar ese moco al exterior arrastrando consigo cualquier elemento indeseado como polvo, humo, bacterias, virus.


Es importante que recuerdes todos esos componentes que te he mencionado: vellos, moco, músculo, todos en los bronquiolos.
Si bien todo ese complejo mecanismo es para protegernos a veces por alguna condición esa protección se transforma en una respuesta exagerada y conlleva a lo que conocemos como asma.
El mecanismo normal sería que si algún agente entra a través de bronquios y antes de que llegue a bronquiolos y alveolos nuestro cuerpo se defiende produciendo más moco que los vellos sacaran y el músculo se contrae levemente para evitar que entren esos cuerpos extraños. Pero en el paciente alérgico ocurre una respuesta exagerada que a veces ni necesita de un agente o cuerpo extraño y se desencadenan esas respuestas. 

Como parte de ese hermoso proceso de defensa Aumenta el aporte de sangre a los pulmones para producir más moco y esto si se mantiene llega a producir inflamación y el músculo que se contrae se mantiene de forma sostenida. Y todo esto conlleva a que el bronquiolo que habíamos dicho que es muy pequeño puede obstruirse y no dejar pasar el aire. Por esta razón escuchas ese silbido porque el aire está pasando por un tubo muy delgado y aparece dificultad para respirar cuando ya se ha mantenido por algún tiempo y los gases que deben salir y entrar no lo están haciendo de forma adecuada. El oxígeno no está entrando disminuye en sangre y el cerebro lo detecta y el Co2 tampoco está saliendo por lo que se acumula en sangre. Estos gases activan mecanismos en el cerebro para que respiremos con mayor frecuencia y de forma más intensa. Le está diciendo a los pulmones trabajen mas. Y aparece la disnea o dificultad para respirar.


Como ves ya conoces el mecanismo normal y como se altera. Esto es importante porque de esta forma estarás más preparado para poder ayudar a tu hijo cuando es asmático.


Que debemos hacer para ayudar, o mejor dicho cual es el tratamiento adecuado
Por lo que te acabo de explicar sabemos que hay un agente o desencadenante, es importante saberlo porque una vez salgamos de la crisis hay que atacar ese desencadenante que puede ser infecciones como virus, polvo, alergia determinado químico, ejercicio fuerte, estrés, a veces es la suma de varios.



Entre los mecanismos implicados hablamos de producción de moco e inflamación, también mencionamos un músculo bronquial que se contrae,Sabiendo el médico debe atacarlos uno a uno. Por esa razón se usan medicamentos que relajen el musculo que es el mecanismo mas rápido de acción, al relajar el músculo el aire puede entrar y salir con mas facilidad, pero recuerda que aunado a la contracción del músculo que disminuye la luz del bronquiolo hay moco que mientras más duración tenga la crisis es más espeso, por eso debemos hidratar bien para aflojar ese moco y ayudar a su eliminación, y por último usamos medicamentos que  ayudan con la inflamación como los es los esteroides que tienen todos los efectos juntos, desinflaman, relajan.




Estos medicamentos pueden usarse por diferentes vías, inyectados, o tomados por via oral o bien inhalados que es la via mas recomendable, ya que de esta forma evitamos efectos en otros órganos o al menos los disminuimos, los medicamentos que relajan el musculo tambien tienen efectos sobre el corazón y aceleran los latidos, los esteroides tienen efectos sobre todo los órganos de nuestro cuerpo por lo que deben evitarse de forma sistémica.
En otras palabras cuando realizamos una terapia respiratoria o inhaloterapia estamos aportando; solución fisiológica que contiene, líquidos para aflojar el moco y sodio que ayuda a desinflamar, usualmente usamos dos medicamentos,los que relajan el músculo existen muchos y en combinación. Los más usados Berodual, salbutan, etc, y los de efecto antiinflamatorio generalmente esteroides o derivados como Pulmicort, Budecort, etc, Te debes familiarizar con los que tu médico te recomiende y saber la mejor forma de usarlos
En ocasiones cuando la crisis de Asma es severa debemos administrar todos los medicamentos por vía parenteral y al mismo tiempo por vía inhalatoria.
Tu como padre debes estar bien informado para detectar apenas tu niño comience con los síntomas de esta manera logras prevenir ataques más severos, si cortamos el ciclo apenas comienza evitamos que se forme la inflamación que es la más difícil de atacar.


También se dispone de fórmulas que nos permiten atacar las respuestas alérgicas existe gran variedad y es tu médico el que debe ,luego de estudiar a tu hijo, recomendarle cuales protocolos usar.


Finalmente puedes ver que conociendo todo el mecanismo que se desencadena para llegar a la fase más crítica puedes atacar cada uno de los componentes y evitar crisis severas, la mayoría de las veces comienza como un cuadro viral o como parte de un cuadro viral y si iniciamos el tratamiento evitamos su agudización, Asi mismo pidele a tu pediatra que te aconseje los tratamientos para evitar crisis que son la mejor arma en la lucha ya que prevenir es la mejor decisión.



Es importante también que tu hijo practique actividades que lo ayuden a fortalecer su cuerpo sobre todo la musculatura que interviene en el mecanismo de la respiracion, con practicas deportivas como la natación, y cualquier otro deporte de forma continua.




Espero te sirva de mucha ayuda, recuerda darle ME GUSTA a mi blog para que otros puedan beneficiarse,




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lunes, 6 de marzo de 2017

Necesita antibióticos mi niño cuando tiene fiebre?

Necesita Antibióticos mi niño cuando tiene fiebre?

Usualmente es una pregunta que muy frecuentemente te haces como padre.
Debo darle antibióticos a mi niño cuando le da fiebre? Y la respuesta es No, así de simple ya te explico por qué y de una forma muy sencilla..

Existen muchas causas de fiebre y si bien no todas son infecciosas hay infecciones que tampoco necesitan antibióticos

Ahora bien qué es un antibiótico y para qué sirve.

Un antibiótico o antimicrobiano es una sustancia química producida por otros organismos (antibiótico producidos por tipos de hongos) o bien producido por el hombre en el laboratorio el caso de antimicrobianos, y dicha sustancia tiene la capacidad de matar bacterias.

También debes saber que una bacteria es un microorganismo que al entrar a nuestro cuerpo puede causar infección. Una bacteria según su poder agresivo puede entrar a nuestro cuerpo, desplazarse en los diferentes órganos alojarse en ellos y destruir, están dotadas de suficientes elementos para causar daño y muerte a nuestras células.

Sin embargo nuestro cuerpo  también está dotado de elementos que nos ayudan a eliminar esas bacterias y es el maravilloso sistema inmunológico (pronto te traeré este tema) que tiene varios mecanismos para actuar. Este sistema inmunológico trabaja de varias formas cuenta con elementos celulares , los glóbulos blancos, elementos humorales los anticuerpos, entre todos crean una estrategia de defensa que a cualquier general de batallón dejaría asombrado. Está organizado sabiamente para atacar de forma precisa, con esto lo que te quiero decir es que podemos confiar en él.

Al entrar la bacteria a nuestro cuerpo los glóbulos blancos y los anticuerpos las detectan e inmediatamente ocurren una serie de reacciones para eliminarlas. Se activan alarmas que ponen alerta y se inicia el ataque. En ese ataque ocurre un movimiento de recursos al sitio de la invasión para atacar al enemigo, se inicia un proceso de inflamación la zona de guerra se torna muy congestionada de tantas células y elementos de batalla. Estas células blancas liberan mediadores que avisan al cerebro q hay q enviar más ayuda entre esa ayuda está enviar más células blancas y también aumentar la temperatura y aparece la fiebre.

Como ves la fiebre aparece como defensa y significa que ya nuestro cuerpo está haciendo su trabajo. 
Lo más seguro, en la mayoría de los casos, ganamos la batalla, pero hay casos en los que bien sea porque la bacteria es muy agresiva o bien porque nuestro cuerpo no cuenta con suficiente defensa hay que pedir ayuda y el Médico determinará si debe ayudarse con antibióticos y solo aquí es donde entran en acción.

Pero no podemos equivocarnos toda esa reacción también se produce ante los virus que son la mayoría las infecciones que entran a nuestro cuerpo y los antibióticos no pueden eliminar virus así que de nada sirve un antibiótico ante una infección viral.

Es importante que además sepas que los virus causan el 90% de las infecciones y que en su mayoría nuestro cuerpo está capacitado para eliminarlos. Y sabes que? ante infecciones virales también la fiebre está presente.

Otro detalle que debes tener en cuenta y que es lo más importante es que aunque los antibióticos pueden ayudarte a combatir la infección por bacterias también pueden causar daño en nuestro cuerpo. Un antibiótico por sí solo puede desencadenar alergias, el uso continuo, frecuente o prolongado puede causar daño a órganos como riñón, hígado entre otros. Ten presente además el tema de la Resistencia Bacteriana. Las bacterias tienen la capacidad de aprender a defenderse y crear mecanismos que las hacen resistentes a los antibióticos y esa información







se las pasas a sus descendientes, razones de mas Por lo que no se deben administrar a menos que sea estrictamente necesario y es el médico la única persona que tiene la capacidad de determinar si hace falta que tu niño los reciba

En conclusión espero que te quede bien claro que la fiebre puede ser presentarse por muchas causas, entre ellas las infecciones por virus o bacterias, que las bacterias apenas son un 5% y que nuestro cuerpo puede combatirlas así q deja que la naturaleza haga su trabajo y ayudemos cuando realmente sea necesario


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Te invito a seguirme y que aclares tus dudas Espero que te haya gustado
y que sea de utilidad para ti.

miércoles, 2 de septiembre de 2015

ESTIMULACIÓN TEMPRANA DE 6 A 12 MESES

ESTIMULACIÓN TEMPRANA DE 6 A 12 MESES


ÁREA MOTORA GRUESA:


  1. Sentarse en un rodillo (finalidad: fortalecer los músculos del abdomen):
    • Ejercicio: sentar al niño sobre un rodillo grande, sujetarlo por los muslos y rodillas. Deslizar suavemente el rodillo hacia atrás y adelante para que el niño haga un esfuerzo por enderezarse y permanecer sentado en el rodillo.
  2. Sentado en un taburete (finalidad: sedestación y estimular el apoyo sobre los pies):
    • Ejercicio:
      • Sentar al niño en un taburete pequeño de forma que apoye las plantas de los pies en el suelo, y estos queden en ángulo recto con los tobillos, sujetarlo por los muslos.
      • Ir eliminando la ayuda hasta que se mantenga solo en esta posición.
  3. Sentado con las manos sobre los muslos (finalidad: mantenerse sentado):
    • Ejercicio: sentar al niño sobre una superficie dura con las piernas extendidas en forma de uve. Colocarle sus manos sobre los muslos e intentar que se sostenga. Ir aumentado progresivamente el tiempo de permanencia en esta posición, segun las posibilidades del niño. Reforzar
  4. Sentarse sin apoyo (finalidad: sedestación sin apoyo):
    • Ejercicio: Estando el niño sentado sin apoyo en la espalda ofrecerle juguetes desde delante y los lados para que vaya liberando los brazos.
  5. Reflejo de apoyo lateral (finalidad. Proteger ante una caída hacia los lados):
    • Ejercicio: estando el niño sentado sobre una superficie dura empujarlo hacia un lado y otro lado para que apoye la mano correspondiente
  6. Reflejo de paracaídas (finalidad: desarrollar un reflejo de proteccion ante una caída hacia delante):
    • Ejercicio: estando el niño sentado, en un taburete, sin apoyo en la espalda, cogerlo por la cintura y empujarle hacia delante para que coloque sus manos con el fin de protegerse.
  7. Reflejo de paracaídas 2 (finalidad: desarrollar un reflejo de protección ante una caída hacia adelante):
    • Ejercicio:
      • Estando el niño boca abajo cogerlo por los tobillos y elevarlo unos 20 cm, tenerlo en esta posición unos segundos
      • Volver a la posición inicial para que apoye los brazos. Si no lo hace, ayudarle a colocarlos. Reforzar
  8.   Carretilla:( finalidad fortalecer los músculos del pecho y espalda)
    • Ejercicio:
      • Estando el niño boca abajo, levantarlo sujetándole por los muslos y haciendo que se apoye sobre sus brazos.
      • A continuación, incitarle a que se desplace utilizando solamente sus manos.
  9. Arrastre (finalidad: desplazamiento boca abajo):
    • Ejercicio: estando el niño boca abajo, ponerle un juguete fuera de su alcance y animarle a cogerlo. Ayudarle, flexionándole una pierna y dándole un apoyo firme en el otro pie. Ir retirándole la ayuda progresivamente.
  10. Pasar de boca abajo a sentado (finalidad: sentarse sin apoyo ni ayuda):
    • Ejercicio:
      • El niño está boca abajo delante del adulto. Animarle a que se apoye en sus brazos.
      • Agarrarle su hombro izquierdo con la mano izquierda y colocar la mano derecha en su cadera derecha. Hacerle girar de lado tirando en nuestra dirección del hombro del niño.
      • Al mismo tiempo, empuje hacia abajo con la mano que está en la cadera del niño (que será del mismo lado que el hombro que está agarrando) hasta que el niño quede sentado. Reforzar intentos.
  11. Pasar de boca arriba a sentado (finalidad: sentarse sin apoyo ni ayuda):
    • Ejercicio:
      • Estando el niño boca arriba con las piernas extendidas.
      • Sujetarle las piernas con una mano e incitarle a sentarse, levantándolo ligeramente de un hombro, y rotando su cuerpo hacia el otro lado, haciendo que apoye la mano de este lado para que haga un esfuerzo por enderezarse y sentarse.Reforzar los intentos.
  12. Pasar de sentado a boca abajo (finalidad: pasar de sentado a boca abajo)
    • Ejercicio: Estando el niño sentado, animarle a pasarse boca abajo ofreciéndole un juguete de su agrado. Para ello, doblarle las piernas hacia un lado e incitarle a coger el juguete hasta que quede en posición boca abajo.
  13. A cuatro patas (finalidad: mantenerse en posición de gateo):
    • Ejercicio: colocar al niño en posición de gateo, Cuando sea capaz de permanecer en esta posición, impulsar su cuerpo provocando balanceos para conseguir el apoyo alternativo en manos y rodillas.
  14. Gateo (finalidad: fortalecimiento muscular, coordinación de movimientos y desplazamiento):
    • Ejercicio: estando el niño en posición de gateo, animarle a desplazarse ofreciéndole un juguete de su agrado. Si no lo hace, ayudarle colocándole un brazo hacia adelante y empujándole por detrás en la pierna opuesta a la altura de las rodillas.


    • Gateo sobre cojines (finalidad: fortalecimiento muscular y coordinación de movimientos):
      • Ejercicio: cuando sea capaz de desplazarse gateando sin dificultad, colocar cojines de diferentes tamaños o una colchoneta. Animarle a subir a los cojines o colchoneta gateando.
    • De pie con apoyo (finalidad: mantener en posición de pie)
      • Ejercicio: poner al niño de pie, apoyado en un mueble todo el tiempo que resista sin cansarse, ir aumentando progresivamente el tiempo segúnsus posibilidades.
    • De rodillas con apoyo (finalidad: soportar su peso):
      • Ejercicio: intentar que el niño se sostenga, unos segundos de rodillas sujeto a un mueble o cogido de ambas manos.
    • De pie agarrado con una mano (adquirir equilibrio en posición de pie):
      • Ejercicio: estando el niño de pie, agarrado a un mueble, ofrecerle un juguete que le guste de forma que tenga que liberar una mano para cogerlo.
    • Andar cogido por las caderas (finalidad: deambulación):
      • Ejercicio: poner al niño de pie, cogerlo por las caderas y provocarle pasos con movimientos alternativos de las caderas. Reforzar.
    • Coger objetos del suelo (finalidad: equilibrio y control del

      propio cuerpo en posición de pie):
      • Ejercicio: Estando el niño de pie, sujeto a un mueble, colocar un juguete de su agrado en el suelo para que se agache a cogerlo. Empezar con juguetes altos e ir disminuyendo la altura de éstos a medida que disminuyan sus dificultades. Reforzar sus intentos.
    • Reflejo de apoyo posterior (finalidad: protegerse ante una caída de espaldas):
      • Ejercicio: estando el niño sentado sobre una superficie dura, empujarle hacia atrás para que apoye una mano para no caerse. Si no lo hace, ayudarle colocándoselas. Poco a poco ir retirando la ayuda. Reforzarsus intentos.
    • Dar pasos agarrado a un mueble (Finalidad: deambulación):
      • Ejercicio: Con el niño de pie, sujeto a un mueble, colocarle un juguete fuera de su alcance de forma que tenga que da un paso para cogerlo. Aumentar progresivamente el número de pasos según las posibilidades del niño.
    • Dar pasos cogido por las axilas (finalidad: deambulación):
      • Ejercicio: Poner al niño de pie. Cogerlo por las axilas y animarle a dar pasos. Para ello elevarle ligeramente por una axila, para que libere el pie de ese lado mientras se apoya en el otro. A continuación, hacer lo mismo con la otra axila. Reforzar sus intentos.
    • Dar pasos cogidos de la mano (finalidad: deambulación):
      • Ejercicio: Animar al niño a dar pasos, colocándonos agachados enfrente del niño, y cogiéndole de ambas manos. Las manos no han de sobresalir del nivel de los hombros.
    • Dar pasos de un mueble a otro (Finalidad: deambulación):
      • Ejercicio: Poner dos muebles ligeramente separados, colocar al niño cogido a uno de ellos y mostrarle un juguete de su agrado en el otro, animándole a cogerlo. Ir separando progresivamente la distancia entre ambos muebles. Reforzar.

    ÁREA MOTORA FINA


    1. Golpeteo vertical (finalidad: coordinación de los movimientos de ambas manos):
      • Ejercicio: Darle un objeto al niño y enseñarle a golpear con él sobre una superficie dura. La superficie debe estar en sentido horizontal y el golpeteo debe ser de arriba a abajo (vertical):
    2. Coger dos objetos (finalidad: manipulación simultánea con ambas manos):
      • Ejercicio: ofrecer un juguete, a continuación, ofrecerle el otro juguete, intentando que sostenga los dos al mismo tiempo, uno en cada mano.
    3. Pinza digital (finalidad: desarrollo de la motricidad fina):
      • Ejercicio: Ofrecerle canicas, botones, bolitas... para que las coja con los dedos índice y pulgar. Ayudarle si es necesario, cerrándole el resto de la mano. Reforzar sus intentos.
    4. Golpeteo horizontal (finalidad: coordinación de los movimientos de ambas manos):
      • Ejercicio: darle dos objetos, uno en cada mano y enseñarle a golpear uno contra otro, en sentido horizontal.
    5. Tocar el piano (finalidad: desarrollo de la motricidad fina):
      • Ejercicio: enseñarle a tocar el piano pequeño con el dedo índice.
    6. Tocar interruptores (finalidad: desarrollo de la motricidad fina):
      • Ejercicio: hacer que el niño apriete timbres, interruptores de la luz... con el dedo índice. Mantenerle el resto de la mano cerrada, si no puede hacerlo solo.
    7. Sacar objetos de un recipiente ancho (finalidad: coordinación visomanual):
      • Ejercicio: Sentar al niño, presentarle un juguete en un recipiente ancho y poco profundo. Animarle a sacarlo. Reforzar sus esfuerzos.
    8. Señalar con el dedo índice (finalidad: desarrollo de la motricidad fina):
      • Ejercicio: enseñarle a marcar números en el teléfono con el dedo índice.
    9. Sacar anillas grandes de un eje (finalidad: coordinación visomanual):
      • Ejercicio: Sentar al niño, mostrarle un eje con anillas grandes para ensartar y enseñarle a sacarlas una a una. Si no lo hace, inclinar ligeramente el eje y ayudarle, retirar poco a poco la ayuda hasta que lo haga solo, reforzar sus intentos.
    10. Meter objetos en un recipiente ancho (finalidad: coordinación visomanual):
      • Ejercicio: Sentar al niño, darle un objeto, dejárselo unos segundo. A continuación, persentarle un recipiente ancho y animarle a meterlo dentro, si es necesario ayudarle.
    11. Ensartar anillas grandes en un eje (Finalidad: coordinación visomanual):
      • Ejercicio: enseñar al niño a ensartar anillas grandes en un eje. Si es preciso, ayudarle llevándole en el movimiento, retirar la ayuda poco a poco hasta que lo haga solo, Reforzar.


    ÁREA PERCEPTIVO COGNITIVA

    1. BUSCAR OBJETOS CAIDOS (finalidad: tomar conciencia e que objeto sigue existiendo, aunque no lo vea):
      • Ejercicio: Siente al niño sobre sus rodillas ante una mesa, mueva despacio una cucharilla sobre la mesa y dejala caer al suelo, para ver si el niño sigue el movimiento de la cuchara con su mirada y busca en la dirección en la que ha caído. Si no lo hace, ayudarle guiándole su cabeza hacia el lugar correcto. Reforzar.
    2. Tirar de un cordón para alcanzar un juguete (finalidad: utilización de intermediarios)
      • Ejercicio: colocar un juguete ataco a una cita fuera del alcance del niño, pero de modo que el cordón quede cerca de su mano, y enseñarle a coger el juguete tirando de la cinta. Reforzar sus intentos.
    1. ENCONTRAR OBJETOS OCULTOS (finalidad:el objeto sigue existiendo aunque no esté ante su vista)
      • Ejercicio: Enseñarle un juguete de su agrado y escondérselo ante su vista bajo una caja. Animarle a levantar el recipiente para encontrar el juguete. Repetir lo mismo pero con un pañuelo.
    2. Imágenes (finalidad: percepción visual de colores y formas):
      • Ejercicio: enseñar al niño cuentos de dibujos sencillos y coloridos variados. Llamarle la atención acerca de las imágenes hablándole de ellas.


    ÁREA DE LENGUAJE


    1. Emisión de sonidos labiales y dentales (p,b,t,d,m) (finalidad: desarrollo del lenguaje expresivo):
      • Ejercicio:
        • Jugar a emitir con el niño, frente a frente, sonidos compuestos esencialmente por las vocales “a” y “e” y las consonantes dichas anteriormente.
        • Hacer el ejercicio anterior, pero con el niño y el adulto ante un espejo grande.
    2. Responder claramente a su nombre (finalidad: conocer su nombre):
      • Ejercicio: llamarle con frecuencia pronunciando su nombre para que vuelva la cabeza hacia la persona que lo llama. Si no lo hace girarle hasta que poco a poco lo haga solo. Reforzarle.
    3. Una prohibición (finalidad: desarrollo del lenguaje comprensivo):
      • Ejercicio: cuando el niño realice algo inadecuado decirle un “no” rotundo al mismo tiempo que se le detiene en lo que hace.
    4. Instrucciones sencillas (finalidad: desarrollo del lenguaje comprensivo):
      • Ejercicio: darle órdenes sencillas del tipo “di adios”... para que las realice.
    5. Conocer el significado de “papá” y “mamá” (finalidad: desarrollo del lenguaje comprensivo):
      • Ejercicio: preguntarle al niño: “¿dónde está mamá?” si no mira, volver su cabeza hacia el sitio correcto. Hacer lo mismo con papá.
    6. Llamar a “papá” y “mamá” (finalidad: desarrollo del lenguaje expresivo):
      • Ejercicio: Preguntarle al niño “¿quién está aquí?” señalando a la persona. Decir “mamá”. Repetir la pregunta y animarle a responder el. Hacer lo mismo con papá.
    7. Preguntarle por objetos muy conocidos (finalidad: desarrollo del lenguaje comprensivo).
      • Ejercicio: Hacerle preguntas del tipo “¿dónde está la...(nombrar el objeto)?”. Siempre ha de estar el objeto que se le pide que busque, cerca de él. Si no lo hace, girar su cabeza hacia el sitio correcto.
    8. Responder a “dame” (finalidad: comprensión):
      • Ejercicio: darle un juguete al niño, dejárselo unos segundos en su mano. A continuación, decirle “dame”. Si no lo hace, ayudarle a que lo deje en nuestra mano. Reforzar sus esfuerzos.
    9. Imitar el sonido de un coche (finalidad: imitación y desarrollo del lenguaje expresivo):
      • Ejercicio: Darle un coche de juguete y enseñarle a imitar su ruido. Exagerar el movimiento de los labios. Reforzar sus respuestas.
    10. Imitar los sonidos de los animales (finalidad: imitación y desarrollo del lenguaje expresivo):
      • Ejercicio: mostrarle láminas sencillas de animales conocidos y enseñarle a imitar sus sonidos. Reforzar sus respuestas.



    ÁREA SOCIAL:


    1. Participar en los juegos de escondite (finalidad: iniciación en el juego participativo):
      • Ejercicio:
        • Ponerse niño y adulto frente a frente, coger un pañuelo y colocarlo sobre vuestra cabeza, animarle a que nos lo quite.
        • Hacer lo mismo pero tapando la cabeza del niño.
        • Jugar con el niño al escondite, escondiéndonos y volviendo a aparecer. Reforzar el intento de búsqueda por parte del niño.
    2. Masticación (finalidad: hábitos alimenticios y preparación del aparato fonador del lenguaje):
      • Ejercicio: Darle alimentos cada vez menos triturados para que vaya realizando movimientos de mascado. Proporcionarle alimentos duros: zanahorias, galletas, pan duro... para que muerda.
    3. Imitar movimientos de adultos (finalidad: desarrollo de la imitación gestual):
      • Ejercicio: colocarse niño y adulto frente a un espejo. Enseñarle a imitar movimientos de cabeza en sentido horizontal al mismo tiempo que se dice “no” y en sentido vertical, diciéndole “si”. Asimismo enseñarle a imitar “palmitas” y “adios”.
    4. Ayudo en mis comidas (finalidad: iniciar al niño en la autonomía en las comidas):
      • Ejercicio:
        • Usar el vaso con ayuda: poner el vaso entre sus manos y decirle “bebe”. Le ayudamos a que se lo lleve a la boca. Poco a poco le retiramos la ayuda.
        • Darle pan o galletas en la mano y enseñarle a comérselas. Al principio, ayudarle si es preciso, dirigiéndole la manos hasta su boca. Poco a poco ir retirando la ayuda. Reforzar sus respuestas.
    5. Ayudar a vestirse (finalidad: iniciarlo en el vestirse y desnudarse):
      • Ejercicios:
        • Cuando se vaya a vestir, antes de ponerle el pantalón “mete el pie”. Reforzar el intento de acercar el pie a la ropa. Hacer lo mismo con la manos y otras prendas de vestir.
        • Cuando se le vaya a desnudar, decirle “saca la mano” o “pie” según la ropa que sea. Reforzar su colaboración.
    6. Juego cooperativo con la pelota (finalidad: iniciarlo en el juego cooperativo):
      • Ejercicio: sentarse niño y adulto frente a frente y jugar a lanzarse la pelota uno a otro. Si el niño no participa, colocarse otro adulto detrás del niño y ayudarle guiando su manos. Reforzar sus esfuerzos.



    Dra, ZORAYA PEÑA
    PEDIATRA


    lunes, 3 de agosto de 2015

    El estrés en los niños

    El estrés en los niños



    En esta oportunidad les comparto este interesante articulomuy actual y que muchas vecespasa desapercibido porque pensamos que nuestros niños no se estresan.

    ¿Qué observar, cómo detectarlo, qué hacer?

    En una consulta de crianza unos papás comentaban A mi hijo últimamente todo le molesta, se irrita ante cualquier situación que no le gusta o algo que no le sale y estamos muy preocupados. ¿Qué podemos hacer?



    Y esta pregunta me lleva a reflexionar junto a Uds. acerca de si esa es o no una forma de manifestación del estrés en los niños.

    Para lo cual es necesario definir primero que se entiende por estrés. Y qué señales nos dan para darnos cuenta.

    Los bebes y los niños pueden sufrir estrés.




    El estrés es una respuesta automática y natural del cuerpo y las emociones ante una experiencia o situación que produce sorpresa, miedo o amenaza.
    También puede pensarse como una forma de  reacción ante algo que desborda los limites habituales de tolerancia, por ejemplo, (exceso de actividades, de estudio, falta de sueño o de ocio-descanso, algún hecho traumático)"




    La característica particular que convierte a un hecho ocasional en una situación de estrés es su permanencia en el tiempo.

    Por eso es necesario diferenciar una situación o una crisis natural producto de un hecho puntual agudo y concreto de un estado  más estable.



    Un niño puede alterarse y tener una reacción desmedida frente a algo imprevisible, por ejemplo un golpe o caída, un grito, una actividad especial que esté haciendo o una vivencia desagradable que le toco presenciar. Pero si comienza a formarparte de su cotidianeidad reaccionar con tanta intensidad pasa de ser una conducta  de alerta, protección o resguardo  a un estado que le produce malestar permanente. Siempre un cambio abrupto implica una adaptación y tiempo.



    Deben ser tenidas en cuenta en los niños estas expresiones corporales y de conducta dado que están llenas de sentido. Nos hablan, y son más comunes de lo que pensamos.

    Pero así como el estrés puede manifestarse de forma explosiva también hay que estar atento a niños que se 'meten para adentro' y se los nota inseguros y vulnerables. Ellos también pueden estar padeciéndolo.



    Algunos pautas para poder observar al niño

    -Está irritable.

    -No quiere comer.

    -Le duele la cabeza.

    -Esta distraído en la escuela.

    -Siempre tiene alguna dolencia o malestar físico.

    -No se concentra mientras hace la tarea.

    -Tiene un enojo permanente  y poca tolerancia a los límites

    -Perdió el interés por una actividad que antes le gustaba mucho.

    -Duerme mal.

    -Episodios reiterados de furia o agresividad.

    -No juega, está triste.

    Estas son algunas de las primeras conductas que pueden variar en la vida cotidiana de un bebé y de un niño cuando suponemos que esta atravesando un momento o período de tensión o estrés excesivo.



    ¿Y que hacer?

    Primero preguntarme como adulto qué puede estar pasándole y pasando en casa o la escuela y luego preguntarle al niño según su edad, si hay algo que lo está preocupando, si lo podemos ayudar o si sucedió algún hecho que nos quiera comentar que lo tiene así.

    Por qué cree que se esta sintiendo así o según el caso plantear lo que nosotros observamos que cambió. Y ver qué nos responde. Cuál es su reacción.

    Este es un buen primer paso para iniciar la búsqueda de respuestas.

    Luego se verá si se puede resolver fácilmente o es necesario consultar a un especialista.

    Algunos niños tan solo necesitan la presencia y cercanía de sus padres, otros un contacto más estrecho cuerpo a cuerpo, tal vez algunos desean estar solitos.

    El punto está que aunque estén solos e su cuarto, sepan que estamos allí, incondicionalmente por si nos necesitan. Y respetar su estado emocional de ese momento.




    ¿Exigencias múltiples, poco descanso, personalidad, demanda de atención?

    ¿A quién o a qué atribuirle llegar a esto?
    Lo importante es no buscar culpas sino poder responder esta pregunta con responsabilidad.

    Poder revisar hábitos y rutinas familiares para detectar cuál puede ser el origen de que el niño se comporte así.

    Es clave ver si hubo algún cambio o una nueva situación dentro de casa  o en el jardín de infantes o escuela,que pudo haberlo alterado.

    Por lo general la manera de expresar los afectos en los niños es bastante original, propia y genuina.

    No siempre, por la edad o su posibilidad de hablar lo expresan claramente con palabras.Pero siempre nos dan alguna señal que si se estamos atentos podemos detectarla a tiempo.

    ¿Cómo ayudarlos?

    A veces es necesario  una consulta  que brinde orientación "a la familia y  a la escuela"  para visualizar  qué necesita el niño; revisar si es la institución adecuada para él, darle más tiempo para hacer las cosas,  para adaptarse a los cambios y que cuente con una mayor disponibilidad de su mamá y su papá también  ayudará.

    En las consultas de crianza y en los encuentros con padres fui viendo diferentes situaciones de la vida que afectan a los niños en mayor medida de lo que suponemos.



    Algunas situaciones que pueden producir estrés infantil.

    -Cambios de escuela

    -Mudanza.

    -Nacimiento de un hermano.

    -Separación de sus padres o peleas reiteradas en su presencia.

    -Violencia psíquica o física  sobre sí o sobre algún miembro de la familia.

    -Una operación no programada  ni comunicada con anticipación.

    -Viaje de alguno de los padres.

    -Enfermedad o pérdida  de algún familiar cercano (abuelos, tíos) etc.

    -Exceso de actividades y/o responsabilidades

    -Agenda completa y poco tiempo libre

    -Mal clima familiar (discusiones)

    -Momentos prolongados de soledad

    -Sentirse molestado por niños mayores

    -Tardar mucho en realizar una tarea o lograr algo.

    -Sentirse humillado o ridiculizado en clase.

    -Peleas entre los padres e su presencia.

    -Situación de examen

    - La entrega de boletines e informes en casa.

    -Pérdida o rotura de objetos a repetición.

    -Característica física que lo moleste (usar antejos por ejemplo)

    -Realizar alguna actividad frente a un público que lo mira y escucha (acto escolar.



    Cuando comienzan la escuela

    Si el niño se encuentra estresado, lo que primero aparece generalmente son dificultades en el rendimiento escolar, alrededor de los 6 años. Tal vez la autoexigencia y las expectativas que se tienen de ese momento ayudan a que lo sienta.

    "Ser un buen alumno no es equivalente a ser buen hijo", y los  papás y mamás podemos preguntarnos cómo le estamos pidiendo a nuestro hijos que aprendan. Si somos muy exigentes o no.

    Siempre hay que considerar que "cada caso e hijo es único y diferente: "Lo primero que hay que revisar son las rutinas y hábitos del niño; evaluar si está sobrecargado, si pese a llevar una aparente vida tranquila todo le demanda mucha energía y exigencia".

    -Observar las respuestas frente a las frustraciones y el manejo de las mismas.

    -Es recomendable prestar atención si el niño está dudoso en seguir haciendo las cosas que hacía antes y a veces disfrutaba.

    -Ayudarlos a anticipar aquellas situaciones potencialmente estresantes que si uno conoce a su hijo puede detectar y prevenir:

    -Darle pautas para poder pedir ayuda cuando se sienten en una situación que no pueden manejar.

    -Que puedan confiar en el adulto de referencia. Padre, madre, docente, abuelos.

    -Ayudarlos a expresar su malestar y no guardárselo por temor o miedo a la respuesta del otro no me gusta esto prefiero no hacer tal cosa, lo voy a pensar y veo, trataré de hacerlo.

    -Ayudarlos a reconocer, poner en palabras, y transmitir lo que sienten claramente para que el otro lo comprenda.

    Y no sentirse así presionados a responder reactivamente a todo.



    Cada bebé y cada niño con su historia y su particularidad para expresarse y nos mostrará qué necesita.

    Estando atentos  podemos ayudarlo a superar o reparar estas posibles situaciones sin que le lleguen a producir estrés ni daño a largo plazo y puedan vivir su infancia de la mejor manera.

    Y muchas veces  un síntoma de estrés, como la irritabilidad permanente  puede ser una señal para descubrir si algún sentimiento de tristeza no ha podido ser detectado o expresado  correctamente por el niño en el momento que lo sintió y lo muestra transformado este, en un constante  estado de enojo e insatisfacción.

    Siempre es bueno prestarle palabras para nombrar aquello que le pasa.

    Las palabras sanan, calman, acompañan y ayudan a transformar una situación inestable, extraña que a veces nos sobrepasa en algo real, y posible de ser superado por el niño y toda su familia.









    Lic. Alejandra Libenson

    Psicóloga y Psicopedagoga

    Especialista en Educación, Crianza e Infancia

    Autora del libro "Criando hijos, Creando personas"

    http://www.tudiscoverykids.com/padres/articulos/el-estres-en-los-ninos/